Dada la escasísima por no decir nula difusión de este blog, fruto sin duda de algún complot de índole masónica, bien podría despotricar contra lo que me viniese en gana, o propagar subversivos mensajes del tipo "los reyes magos son los padres", sin temor a demandas, amenazas o castigo alguno. Vale que es muy triste salir impune de casi todo a costa de que nadie sepa de tu existencia ni de lo que escribes, pero bueno, también tiene sus ventajas; como, por ejemplo, realizar el siguiente experimento:
¿Cuántas veces has recibido en tu correo un mensaje en el que se denuncia algo que has de reenviar a todos tus contactos, no para que caiga sobre ti una legendaria maldición azteca -caso de los emails en cadena-, sino para lograr un posicionamiento global contra lo denunciado? Por ejemplo, emails que denuncian el maltrato animal, la malversación de fondos por políticos de cualquier pelaje, la contaminación generada por una empresa concreta... y lógicamente se pide que no se compren prendas de piel, que no se paguen impuestos en un determinado municipio o que no se consuman productos del país en cuestión.
Ahora bien, ¿cuántas veces esos mensajes ofrecen pruebas fidedignas que nos permitan comprobar la veracidad de lo expuesto? Seamos sinceros, puede que en un 99'9% de las veces no se ofrezca la posibilidad de contrastar la información de modo objetivo, pero tampoco nadie se preocupa por comprobar que lo que se recibe pueda ser cierto o bien un bulo cuyo fin persiga direcciones de correo para enviar posteriormente spam, o bien simple y llanamente reírse (con cariño) de la credulidad de la gente.
Con lo tentador que resulta este extremo no puedo resistirme a crear un enorme y pantagruélico pufo sin conexión alguna con la realidad.
La mecánica es sencilla, el sábado día 5 de abril, a las 04.00 am, procederé a enviar el mensaje abajo expuesto a 10 direcciones aleatorias de mi lista de contactos de correo electrónico, solicitando el reenvío de dicho mensaje a todo el mundo por lo "injusto" de la situación expuesta. Y a esperar.
Habrá quien piense, y no le faltará algo de razón, que hay que ser un poco cabroncete para obrar de semejante forma. Pero si bien los correos que enviaré contendrán el mensaje en sí, al pie del mismo no faltará un enlace a este mismo blog, por lo que cualquiera que lo visite una vez leído el mensaje, se dará cuenta de su falsedad y podrá reírse y celebrar conmigo la mentirijilla. Sobra decir que, siendo como es una broma cuyo trasfondo es meramente empírico, espero que las personas implicadas en la misma se lo tomen con humor. Asimismo dejo constancia implícita de la exención de cualquier acción penal por cualquier parte que pueda involucrarse en las consecuencias directas o indirectas de lo aquí consignado siempre y cuando el o los demandantes hubiesen leído este párrafo. Que nunca se sabe.
Y ya, pongámonos serios y solemnes para intentar hacer creible el siguiente mensaje.
¿Telecinco? No, gracias.
El pasado día 29 de marzo dos cámaras de la productora Atlas TV -Telencico- fueron despedidos de sus puestos de trabajo de una forma injusta y vergonzosa. Eduardo Jimeno y Francisco Elías, el primero con 7 años de experiencia en la casa y el segundo con 4, por una caprichosa decisión de la dirección del programa "La noria", de Telecinco fueron cesados de sus funciones de forma indefinida y expedientados por la productora en la que prestaban sus servicios.
Durante una pausa publicitaria del programa, Eduardo Jimeno comentó a nota personal a su compañero Francisco Elías y al regidor del programa lo vergonzoso que era pagarle 24.000 € al invitado de turno cuando a ellos -los cámaras de la productora Atlas TV- no habían cobrado aún la nómina del mes anterior. Al ser Atlas tratado como un proovedor de la cadena de Fuencarral, muchas veces los pagos a la productora se demoran más de lo normal, mientras que los invitados suelen "pasar por caja" nada más intervenir en el programa. Esta política retributiva redunda en casi todos los espacios de la que fuera conocida como "tu cadena amiga". Y visto lo visto, todo aquel que no acepte la manera de hacer de la casa sabe lo que le espera. Verse en la calle tras siete años de servicio y expedientado por la empresa que contratase sus servicios por denunciar una situación vergonzosa. Calculad. 24.000 € (cuatro millones de las antiguas pesetas) por dos horitas aireando trapos sucios, propios y ajenos, mientras que un operador de cámara, por jornadas de trabajo que llegan a las 10 horas diarias, no llega en la mayoría de los casos a los 800 € mensuales.
El comentario relativo a esa "política retributiva", como decimos en una conversación que no trascendió del ámbito privado, fue escuchado por el editor del programa, y nada más terminar este, pidió reunirse con los dos operadores para comunicarles su despido, sin ningún tipo de miramientos. Cuando más tarde pidieron a su productora una explicación, por toda respuesta se encontraron con sendos expedientes laborales solicitados por Telecinco a Atlas TV.
En estos momentos la cuestión está en los tribunales, pero mientras Jimeno y Elías están en sus casas abocados al paro -con un expediente laboral la opción de ser contratados por otra agencia audiovisual es prácticamente imposible- Telecinco sigue haciendo caja, gracias a la audiencia, y pagando cifras desorbitadas a personajes e invitados sin oficio ni beneficio cuya condición de "famosos" parece venir asociada a retribuciones fuera de lo normal.
El que esta situación cambie está en tus manos. Si crees que la actuación de Telecinco en este caso ha sido deplorable, no formes parte de la audiencia que le hace generar unos beneficios cuyo reparto es más que discutible. No les des la razón en un caso como el de los dos cámaras despedidos y expedientados. Por muy partidista o interesada que pueda considerarse esta propuesta se ciñe a una actuación que de permanecer impasibles, seguirá produciéndose, seguirá engrosando las listas del INEM por un lado y los bolsillos de gente de dudosa moral por otro. Trata de exponer esta situación a quien viendo esta cadena no tenga dirección de email para poder conocer esta situación, y que tomen su propia decisión.
Si ya la programación de Telecinco dejaba mucho que desear, creo que esta es la gota que colma el vaso para que muchos le demos la espalda y no seamos espectadores sin voz de una injusticia como esta perpetrada por una empresa más preocupada por cuidar a gente sin escrúpulos en lugar de hacer lo propio con profesionales preparados con un sueldo comparativamente muy inferior.
Confiando en la justicia, hasta que no llegue el juicio y se restituyan los daños ocasionados a los dos operadores, que no cuenten conmigo para tragarme su programación. Espero que tu cociencia te guíe por el mismo camino.
http://profesormoriarty.blogspot.com/
Notas al respecto:
- Los nombres de los supuestos operadores se corresponden a los de dos pioneros del cine en España, dos camarógrafos que existieron realmente a principios del siglo XX, Eduardo Jimeno Peromarta y Francisco Elías Riquelme.
- No tengo ni pajolera idea de lo que cobra un cámara de Atlas TV o Telecinco y mucho menos lo que un famoso por ir a uno de sus programas.
- En ningún caso me hago responsable del uso que pudiera darle un tercero a este artículo y de las consecuencias que pudiera acarrear dicho uso. No obstante, en caso de considerar que el responsable de todo esto bien merece protagonizar un desfile por la Quinta Avenida o los Campos Elyseos, a bordo de un elegante Chrysler descapotable, mientras cientos de ciudadanos corean su nombre y lanzan confeti desde los balcones, todo ello acompañado por una orquesta de viento y percusión uniformada y con majorettes... en ese caso sería hablarlo.